Descubre el poder regenerador
El tratamiento con láser amarillo es una innovadora solución no invasiva para mejorar la salud y el aspecto de la piel. Gracias a su tecnología avanzada, actúa sobre imperfecciones cutáneas con gran precisión, mejorando la textura, la uniformidad y el tono de la piel. Una alternativa eficaz para quienes buscan resultados visibles sin recurrir a métodos agresivos.
Tratamiento con Láser Amarillo
En la Clínica Sierra Gudín incorporamos el láser amarillo Quadrostar Proyellow 577, una tecnología de vanguardia en medicina estética. Este tratamiento está indicado para abordar una amplia variedad de afecciones cutáneas como arañas vasculares, rosácea, cuperosis, acné inflamatorio, puntos rubí y melasma hormonal, entre otros.
La luz amarilla actúa de forma selectiva sobre los capilares y pigmentos responsables de muchas de estas alteraciones, sin dañar el tejido circundante. La longitud de onda específica de este láser permite una absorción óptima por parte de la hemoglobina, facilitando su acción con alta precisión.
Gracias a este procedimiento, es posible reducir el enrojecimiento, calmar inflamaciones y conseguir una piel más uniforme, tersa y luminosa. La sesión dura entre 20 y 30 minutos y permite una recuperación rápida, con mínimas molestias y sin necesidad de cirugía. Además, es una opción especialmente recomendada para controlar los síntomas visibles de la rosácea, mejorando visiblemente la calidad de vida del paciente.
Multifunción
Actúa sobre múltiples afecciones: arañas vasculares, cuperosis, acné, melasma, rosácea y puntos rubi.
Precisión
La luz amarilla trabaja de forma selectiva sin afectar los tejidos sanos adyacentes.
Recuperación
No requiere cirugía y permite volver a la rutina diaria de manera casi inmediata.
Resultados
Mejora el aspecto general de la piel con mayor uniformidad y luminosidad.
«Consigue una piel más uniforme, menos congestiva y más equilibrada.»
¿Tienes dudas?: Tratamiento con Láser Amarillo
¿Para qué sirve el tratamiento con láser amarillo?
El tratamiento con láser amarillo es altamente eficaz para mejorar múltiples afecciones cutáneas de forma no invasiva. Gracias a su avanzada tecnología, actúa sobre dilataciones capilares, rojeces, manchas hormonales, puntos rubí y granos inflamatorios sin causar daño en el tejido circundante.
Está especialmente indicado en casos de rosácea, ya que ayuda a controlar el enrojecimiento y los brotes, y también es útil en pieles con cuperosis o tendencia acneica. La versatilidad de este tratamiento lo convierte en una excelente opción para personas con distintos tipos de piel y problemas estéticos, proporcionando mejoras visibles desde las primeras sesiones.
Es importante recordar que, aunque los efectos son duraderos, algunas afecciones como la rosácea son crónicas, por lo que el tratamiento ayuda a mantener los síntomas bajo control y a mejorar la calidad de vida del paciente de manera sostenida. En Clínica Sierra Gudín te asesoramos de forma personalizada.
¿Cómo funciona el tratamiento con láser amarillo?
El láser amarillo emite una longitud de onda específica (577 nm) que es absorbida de forma selectiva por la hemoglobina y los pigmentos responsables de determinadas alteraciones cutáneas.
Una vez absorbida, la energía del láser actúa sobre los capilares y estructuras afectadas, provocando su coagulación controlada y posterior reabsorción natural por el organismo. Esto permite tratar imperfecciones visibles sin dañar la piel circundante.
El láser Quadrostar Proyellow 577 ofrece un control milimétrico de la intensidad y profundidad del disparo, adaptándose a las necesidades concretas de cada piel. El procedimiento es rápido, seguro y prácticamente indoloro, con sesiones de unos 20-30 minutos y una recuperación muy rápida.
En función del tipo de piel y del objetivo del tratamiento, puede requerirse más de una sesión. Siempre recomendamos aplicar protección solar cada dos horas y evitar la exposición directa al sol para garantizar los mejores resultados.
¿Qué cuidados debo seguir después de una sesión?
Tras someterte al tratamiento con láser amarillo, es fundamental seguir unas pautas básicas para asegurar una correcta recuperación y potenciar los resultados. En primer lugar, se debe evitar completamente la exposición directa al sol durante al menos 10-15 días y aplicar protector solar de amplio espectro cada dos horas.
La piel puede presentar enrojecimiento leve o una ligera inflamación que desaparece en pocas horas o días. Se recomienda mantener la zona hidratada con productos calmantes, sin perfumes ni alcoholes, y evitar tratamientos exfoliantes, peelings o productos irritantes durante los primeros días.
También es aconsejable evitar actividades como saunas, piscinas o ejercicios intensos durante las primeras 48 horas. Si se sigue correctamente este protocolo, los resultados son visibles y muy satisfactorios. En Clínica Sierra Gudín, nuestro equipo médico te proporcionará todas las recomendaciones específicas según tu tipo de piel y la zona tratada.
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